El Tarot de Marsella | XXI, El Mundo

Esta carta es considerada la mejor de todo el Tarot, incluso sobre La Rueda de la Fortuna y El Sol.
La mujer del centro se ha convertido en un ser sagrado, superando 4 etapas en su existencia: los impulsos, las necesidades, los gustos y la racionalidad, logrando así complementarlas todas y volverse tan poderosa como es. En ella habita la fuerza del león, la resistencia del toro, la libertad del águila y la inteligencia del hombre, pudiendo usar cada uno de estos atributos según la ocasión y sin que le falle ninguno.
Esta carta es el símbolo de la Victoria por sobre cualquier adversidad, el triunfo máximo, la conclusión de todos nuestros esfuerzos. Para el consultante representará la cosecha luego de un largo tiempo de siembra, el encuentro con sus tesoros internos y muchos más milagros que los que él podría esperar jamás.


Posición Derecha: Victoria.
El consultante puede estar tranquilo, porque las cosas que lo aquejan se irán tal como vinieron. Se avecina un período de buena suerte donde todas las situaciones que parecían irremediables se revertirán como por arte de magia, así que conviene iniciar proyectos o tareas en esta racha, los cuales florecerán sin problema alguno. Esta carta anuncia batallas ganadas, amor correspondido, triunfo por sobre cualquier adversario que haya amenazado con anterioridad y concreción de viejos anhelos que no pudieron ver la luz antes. Es un período de paz para el consultante, quien podrá disfrutar de aquello por lo cual se ha esforzado gran parte de su vida. No es malo relajarse en este momento, es más, la vida misma lo pide y da la tranquilidad necesaria en bandeja. El Mundo prevalece con su fuerza y suaviza o anula el efecto de las cartas más negativas (El Diablo, La Torre), volviendo todo más fácil de encarar y con resultados más a la vista que en cualquier otra circunstancia.


Posición Invertida: Exposición.
Tal como sucede con El Sol, El Mundo a la inversa no llega a ser negativo. Las cosas se darán de otro modo, quizás más indirecto, pero será el cimiento de un episodio mejor de la vida. Esta posición suele aparecer cuando el consultante se expone a un cambio brusco a través de una depresión o una enfermedad, una experiencia límite o un cuestionamiento interno de grandes proporciones, ante lo cual la manera de encarar las situaciones vividas cambia radicalmente. Simboliza el éxito tal como El Mundo derecho, pero ese éxito se labrará con un poco más de trabajo y más adelante, lo que no quiere decir que no llegará.